Se lanza hoja de ruta climática para los próximos 10 años en Colombia
El gobierno nacional presentó las metas y acciones que se deben implementar en los próximos 10 años para contribuir en la lucha contra el cambio climático. Se trata de un paquete de casi 200 medidas que hacen parte del documento conocido como “Contribución Determinada a nivel Nacional de Colombia”.
Cuando se firmó el Acuerdo de Paris hace cinco años, Colombia presentó ante la ONU un primer informe sobre estas contribuciones. A nivel general, todas las medidas propuestas en ese momento apuntaban a que el país sería capaz de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 20%, si contaba con cooperación internacional alcanzaría hasta un 30% para hacerlo en un plazo estimado al 2030.
“Desde enero de este año, el país comenzó a implementar su plan 2030, un proceso en el que todos los sectores del gobierno, el sector privado, los expertos, las comunidades y la ciudadanía en general, serán cruciales”
En este nuevo documento, Colombia elevó su nivel de ambición. Ahora el compromiso es reducir en 51% las emisiones de gases efecto invernadero.
Quiere lograrlo a través de 196 medidas de mitigación, adaptación y medios de implementación. “Desde enero de este año, el país comenzó a implementar su plan 2030, un proceso en el que todos los sectores del gobierno, el sector privado, los expertos, las comunidades y la ciudadanía en general, serán cruciales”, afirmó el Ministro de Ambiente Carlos Eduardo Correa.
El país trabajó por más de 18 meses en la actualización de las metas en acción climática.
El documento incorpora tres componentes fundamentales: adaptación al cambio climático, mitigación de GEI y medios de implementación (que se refieren a condiciones como financiamiento, creación de capacidades, tecnología e instrumentos para lograr el poner en marcha las acciones). Además, tiene unos principios rectores, como el de progresión y no retroceso; es decir, que las metas sean cada vez más ambiciosas.
Los documentos indican que por primera vez la descripción de las medidas específicas a partir de las cuáles se lograrán las metas, algo que no era explícito en el documento anterior. De igual forma, se hace por primera vez un vínculo entre las problemáticas de cambio climático y la salud pública; y se contabilizan nuevas contribuciones de emisiones de C02 que antes no eran analizadas, como por ejemplo las de carbono negro. La actualización también incluyó siete nuevas categorías de emisiones.
Para enfrentar el cambio climático no es suficiente centrarse en reducir la emisión de GEI y la contaminación atmosférica. Es necesario también que los países se preparen para los impactos que ya se están viendo a raíz de los cambios del clima. Hay que planificar y adaptarse.
Durante el primer año de esta emergencia, las micro, pequeñas y medianas empresas soportaron algunos de los peores golpes de la aguda crisis económica del país. Aunque el Gobierno lanzó medidas, estas no fueron suficientes. Los sectores piden más apoyo en la reactivación.
El documento se basa en 113 indicadores para profundizar el análisis y entendimiento de la vulnerabilidad y el riesgo por cambio climático del país, distribuidos en los componentes de amenaza, sensibilidad y capacidad adaptativa; y subdivididos en las dimensiones de seguridad alimentaria, recurso hídrico, biodiversidad y servicios ecosistémicos, salud, hábitat humano e infraestructura.
Fuente: El Espectador