By Pequeños y grandes empresarios apoyan el Paro pero las perdidas son enormes
En los 15 días que lleva el Paro Nacional, pequeños, medianos y grandes empresarios se han visto afectados económicamente. Si bien muchos apoyan las manifestaciones y realizan bloqueos pidiendo al gobierno soluciones que los aquejan, también son conscientes que sus ganancias se ven afectadas.
Para ellos las manifestaciones son vías legítimas para alzar la voz de quienes sienten que hay inconformidades y sus derechos se ven vulnerados; sin embargo, los empresarios del país también les dicen a los manifestantes que el derecho al trabajo, a la movilidad segura, el abastecimiento de alimentos a los ciudadanos son parte de las cosas que no se pueden vulnerar con los bloqueos o actos de vandalismo.
Por eso, ellos alzan su voz para que vean la realidad que viven en estos días y que las pérdidas que dejan la inactividad, los bloqueos y los daños a la infraestructura productiva, se ha extendido al comercio, al sector agropecuario, al suministro de combustibles, a cultivos de campesinos y al transporte, entre otros, que son afectaciones que llegan a todas las familias, incluso las de los que se encuentran en las calles protestando.
Los comerciantes estimaron que estos días de protestas, que en algunas jornadas han derivado en actos de violencia y vandalismo, les han representado pérdidas por $880.000 millones, según dijo el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal.
Hasta con cadenas de oración, han recurrido algunos pequeños empresarios de Itagüí y Medellín antes de darse por vencidos con la actual situación del país. La situación económica, sumado a cierres por pandemia que es otro de los problemas que se les suma y a marchas todos los días, aseguran, los tienen quebrados. Aunque saben que el cuidado de la salud prima, la situación no les da para escoger, tienen que salir a producir, pues saben que son la base de la cadena de la economía del país y no pueden frenar sus empresas.
Aún no hay cifras concretas de las pérdidas en estos 15 días de Paro Nacional, pero crece la preocupación de los gremios de la producción y de algunos expertos, en el sentido de que esta situación termine por golpear la recuperación de la economía.
Para la Federación Nacional de Comerciantes regional Antioquia (Fenalco Antioquia), las repercusiones de lo que vivió el gremio en el último mes, con movilizaciones y restricciones los fines de semana, apenas están por verse.
Por ejemplo, el sector ganadero advirtió que en la primera semana de movilizaciones las pérdidas del sector por los obstáculos para comercializar cerca de 8,2 millones de litros de leche diarios y de 40.320 cabezas de ganado superan los 121.335 millones de pesos.
Esta misma situación la están padeciendo los productores de hortalizas, de carne de cerdo, de pescado y el sector avícola, quienes, además de las millonarias pérdidas que les está ocasionando el paro, también señalan que más de 500.000 empleos directos están en juego debido a esta difícil situación.
De esta manera, Juan Felipe Montoya, presidente de Incubadora Santander – Huevos Kikes, se pronunció frente a la situación que esta viviendo el sector avícola y solicitó al gobierno ayudas económicas para no perder la producción de huevos y pollos que abastecen a gran parte del país con sus productos. Entiende que ante situaciones que afectan a la ciudadanía, es natural hacerse sentir, sin embargo, esta de acuerdo con que se ejerza el derecho a la protesta, pero no a los bloqueos y actos de vandalismo.
En la calle, los habitantes de a pie también han sentido el cambio de dinámica con las protestas sociales, si bien entienden la situación, piden por los derechos de todos los ciudadanos del país, para que haya equidad y beneficios para todos, sin afectar el bien público y los comercios de otros que han trabajado duro para levantar su medio de sustento.
Los locales de pequeños empresarios y grandes cadenas han sido blanco de ataques y saqueos. Las sedes bancarias también han tenido importantes afectaciones.
El bloqueo de vías ha generado un fuerte desabastecimiento de alimentos hacia los principales centros de consumo, lo que afecta a productores, comercializadores y consumidores.
Los paneleros, por su parte, dicen que las marchas y bloqueos están impidiendo el abastecimiento de este alimento que consume el 96% de los hogares colombianos, sobre todo los de más bajos recursos, pero, además, ponen en riesgo la situación económica de 350.000 familias, de las cuales el 90% son pequeños productores.
La central de Abastos de Bogotá (Corabastos) informó que el ingreso de productos se redujo 50% entre el primer día de paro, apenas entraron 5.307 toneladas. En día normal ingresan un poco más de 10.000 toneladas.
Por su parte, las pérdidas diarias de los productores de leche se estiman en $5.000 millones, por la imposibilidad de transportar de las fincas a los centros de procesamiento industrial unos 4 millones de litros diarios, de 9 millones de litros que consume diariamente el país. Según Asoleche, Cundinamarca, Boyacá, Nariño, Cauca y Valle, son las regiones más afectadas.
Gonzalo Moreno, de la Federación Nacional de Avicultores (Fenavi) indicó que el sector tiene represadas 16.000 toneladas de carne de pollo y 120 millones de huevos. Y hay 30 millones de aves en peligro por falta de alimentación. Los piscicultores, agrupados en Fedeacua, aseguran que cada semana se movilizan por el país 3.214 toneladas de pescado y un volumen significativo se puede perder. También se ha visto afectada la movilización de ganado bovino y de cerdos con la consecuente alza de precios.
Fedearroz, Fedegán, Asocolflores, Fedepanela, Fedecacao y Asofrucol, expresaron su preocupación por las elevadas pérdidas.
Según la Asociación Colombiana del Petróleo, aproximadamente 220 estaciones habían sido vandalizadas, saqueadas o cerradas, mientras un 20% de las estaciones de servicio no tenían combustible para la venta.
Los campesinos y microempresarios enfrentan un problema poco usual en una tierra tan abundante como la Pacífica, donde en este momento la falta de comida para animales y la imposibilidad de transportarse han causado que los bovinos y aves empiezan a morir de hambre o recurren al canibalismo por la falta de comida.
Si la situación continúa, se deteriora la salud de los bovinos lo que llevaría al cierre definitivo de la producción, por lo que muchas empresas tendrán que eliminar algunos empleos por falta de liquidez o en el peor de los casos, cerrar de manera definitiva.
Todos estos empresarios de diferentes sectores les piden a los manifestantes y al gobierno llegar a un acuerdo para que la economía del país no se vea afectada, para que los empleos se sigan generando y sobre todo la comida llegue a todos los hogares. Ellos como todos quieren trabajar, saben que hay inconformidades, pero que a través de mesas de diálogo se pueden llegar a consensos que eviten la quiebra de las empresas, perdida de vidas humanas, heridos, daños a bienes ajenos, entre otros; la solución no está en la violencia, sino la protesta pacífica y los acuerdos por vías legales.
