By La vida de lujos que nos da la tecnología
Desde la Revolución Industrial la vida de las personas empieza a tornarse relativamente más fácil a la que se tenía anteriormente.
La vida de lujos que nos da la tecnología. En los últimos años se han visto avances e inventos tecnológicos que le han cambiado la vida a millones de ciudadanos en el mundo:
Internet, el transporte, electrodomésticos o el mismo celular desde donde probablemente esté leyendo esta nota.
Sin embargo, si nos remontamos a finales del siglo XVIII y principios del XIX, las condiciones en las que vivía y trabajaba mucha gente, cambiaron radicalmente con la Revolución Industrial.
Antes de este periodo, todos debían conformarse con vivir en la pobreza extrema, no había elección.
La asombrosa riqueza que trajo la Revolución Industrial impactó el bienestar general y elevó los estándares de vida y las aspiraciones.
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La pobreza, que durante siglos era una situación normal y general, llegó a considerarse algo insoportable e inadmisible, con las oportunidades que la nueva era ofrecía.
A partir de ahí cada generación ha tenido que enfrentarse a nuevos retos, cambios sociales, innovaciones, equipos e incluso al uso de la tecnología. Pero todos ellos han supuesto mejoras en la calidad de vida.
La innovación tecnológica, una perspectiva evolutiva
El conocimiento tecnológico ha sido objeto de estudio para los economistas desde finales del siglo XVIII.
Los desarrollos de los últimos 30 años en áreas como el crecimiento económico, la organización industrial y la historia económica, han hecho que el análisis del conocimiento tecnológico haya cobrado otros rumbos.
Dentro de los cambios tecnológicos, el más importante es la innovación tecnológica, que no es más que la aplicación de nuevas rutinas en la producción de mercancías.
Algunas de estas nuevas ideas no sobreviven, otras pueden adaptarse, ya sea para reemplazar a las existentes o para trabajar en conjunto. Así, las innovaciones ocurren como una competencia dinámica entre las nuevas y las viejas rutinas.
Un proceso de aprendizaje
Una de las características de la innovación tecnológica es que se ha llevado como un proceso de aprendizaje a través de momentos históricos.
La Revolución Industrial (1760 – 1840) se caracterizó por ser un proceso de aprendizaje individual. La innovación en esa época se destacó por la destreza y la habilidad de cada inventor.
En contraste, el proceso de innovación tecnológica desarrollado durante la segunda Revolución Industrial (1870 – 1914) presentó características diferentes, más acordes a un proceso de aprendizaje social, como el surgimiento de nuevos modelos económicos, avances en el sector automotriz, eléctrico, científico e industrial.
Estos avances permitieron un importante crecimiento demográfico, campesinos se trasladaron a las grandes ciudades y crecieron las urbes, en especial donde había mayor posibilidad de conseguir trabajo.
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En este periodo de la historia se abrió una era de producción para las necesidades de las masas. Los asalariados eran los principales consumidores de los productos que producían las fábricas.
En la economía de mercado no hay otro medio de adquirir y preservar la riqueza que abastecer a las masas de la mejor y más barata manera de todos los bienes que piden.
La tecnología llegó para cambiarlo todo
En las últimas décadas, la innovación cada vez es más rápida en la medicina, la educación, medios de transporte, el almacenamiento de datos, las comunicaciones, entre otros y han contribuido a una mejora general de los niveles de vida.
No se puede negar que, en algunos sectores, la tecnología le ha costado el puesto de trabajo a muchas personas. Sin embargo, las nuevas tecnologías han aliviado la carga de trabajo.
Incluso los procesos más simples de la rutina diaria, como ir de compras, cocinar, lavar, etcétera, se han transformado como consecuencia de dicho desarrollo.
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Con los avances, millones de personas tienen acceso a tecnología hospitalaria, facilidades para el hogar, innovación en la educación o mejoras en los puestos de trabajo.
Sin embargo, lo que a primera vista parece ser una rutina normal, en ocasiones no nos detenemos a analizar por todo lo que la historia ha tenido que pasar para llegar a ello.
El hecho de disponer de cocinas eléctricas es algo que hoy damos por supuesto, sin pensar que antes se cocinaba sobre una hoguera; ver televisión lo hacemos con la misma naturalidad con que nuestros antepasados se sentaban a escuchar relatos.
A partir de las primeras técnicas para encender fuego, hasta las complejas máquinas del mundo moderno, todos nos hemos beneficiado de desarrollos técnicos que han marcado la organización social, las tradiciones y los cambios culturales.
Tal es así que desde que nos levantamos, hasta que nos vamos a dormir, la tecnología nos acompaña.
No somos conscientes hasta qué punto dependemos de ella, pero hoy en día no podemos vivir sin ella.
De todos los aspectos en los que la tecnología e Internet revolucionó de forma radical la vida de millones de personas son los siguientes:
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El acceso a la información
Solo tienes ingresar en un buscador lo que quieres saber, en el momento que quieras y dónde quieras. Puedes consultar en tiempo real una noticia, investigar acontecimientos, saber sobre un evento, etc.
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Inventos como los navegadores, el acceso a internet, los dispositivos móviles, han ayudado a crear un mundo en el que la tecnología esté al alcance de todos.
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Comunicación y expresión
La inmediatez del e-mail remplazó las cartas tradicionales y la mensajería instantánea se instaló en los teléfonos.
Los blogs se convirtieron en un importante medio para contar experiencias y expresar opiniones.
El correo electrónico, los SMS, la mensajería instantánea, las llamadas telefónicas y las redes sociales brindaron la oportunidad de relacionarse con otras personas sin necesidad de estar físicamente presentes.
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En promedio una persona pasa entre 2 a 5 horas en las redes sociales o conectado en línea.
- Consumo
El dinero en efectivo se vuelve obsoleto frente a nuevas formas de pagos online, mientras los servicios financieros y los dispositivos móviles simplifican las transacciones.
Antes del e-commerce, era necesario ir a la tienda y hacer fila para pagar, sólo para hacer una simple compra. Con el poder de las compras online, puedes sentarte en el sofá, estar en pijama, presionar unos botones en tu teléfono y comprar.
- Ocio y el entretenimiento
Internet ahora es el rey, situándose en número de horas (14 horas semanales) por encima de la televisión, la radio y la lectura de periódicos y libros.
- El trabajo y formación
El trabajo ahora es una actividad que puedes hacer en cualquier momento y lugar. Las nuevas tecnologías como la video conferencia permiten que los equipos de trabajo interactúen fácilmente, aunque se encuentren a miles de kilómetros de distancia.
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Internet ofrece múltiples oportunidades académicas para formarse a distancia: cursos online, tutorías virtuales, especializaciones o tutoriales están al alcance de un clic.
- Atención sanitaria
Estás enfermo en casa y necesitas consultar a tu médico, solo debes contar con aplicaciones y un Smartphone.
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