¿De dónde proviene la riqueza del país?
Si alguna vez te has preguntado de dónde proviene todo el dinero que el Estado usa para los gastos de la nación, es lo que comúnmente se llama Gasto Público. Para empezar esto el total de gastos que el Estado realiza para garantizar los derechos de los ciudadanos tales como educación, salud, seguridad, entre otros, y proveer bienes y servicios (alcantarillado, electricidad, vías) de los que todos nos beneficiamos. El gasto público incluye, por ejemplo, construir colegios, estaciones de policía, juzgados, carreteras y parques. También sirve para pagar los salarios de los profesores, policías y jueces, las pensiones de los jubilados, los servicios de salud focalizados a través del SISBEN y el régimen contributivo de salud.
Pero cómo se reúne toda la cantidad para asegurar estos beneficios de los que gozamos los ciudadanos, según el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, la principal fuente de ingresos del Estado son los impuestos, que pagamos entre todos los colombianos. Estos tributos incluyen impuestos como el IVA, las contribuciones a salud y pensiones, los impuestos a la renta de las personas y a la renta de las empresas, entre otros. El Estado también consigue recursos de las ganancias de las empresas industriales y comerciales del sector público, (ejemplo: Ecopetrol) y de regalías pagadas por empresas mineras y petroleras privadas.
Ahora con la pandemia, no solo Colombia, sino muchos países han tenido que contemplar planes para mitigar el gasto que ha generado la llegada del Covid-19. Por ejemplo, para el caso de nuestro país la Reforma Tributaria, era una salida para poder solventar deudas con la paralización de gran parte del comercio.
De esta manera para reglamentar y ejecutar el gasto público nacional es necesario hacer un presupuesto anual a través de dos vías, la primera, verificando los ingresos y cuánto dinero va a conseguir el Gobierno en un año y de qué fuentes lo obtendrá. Esta parte del presupuesto general de la nación se conoce como presupuesto de rentas. Por otro lado, están los gastos de lo que el Gobierno nacional planea gastar en un año en salud, educación, ciencia, defensa, etc.
El proceso para determinar el Presupuesto General de la Nación se llama Ciclo Presupuestal. El Ciclo Presupuestal dura todo el año, y tiene cuatro etapas principales:
- formulación
- aprobación
- implementación
- evaluación
Sin embargo, en pocas ocasiones los colombianos son conscientes de la ruta que siguen los recursos que cada uno aporta, a través de los impuestos, para que el Estado funcione. En consecuencia, los ciudadanos se sienten agobiados por la carga tributaria y no ven con claridad el producto de su esfuerzo.
El desconocimiento también es la causa de que, principalmente los colombianos de escasos recursos no perciban como un derecho los beneficios que otorga el Estado a través de programas sociales, financiados con los dineros que aportan todos los habitantes del país.
Los impuestos de renta y el Iva son los que ponen la tajada más grande (85%) para la bolsa pública con la que no solo se financia el funcionamiento del Estado, sino que se paga la deuda externa y se hace la inversión en obras y programas sociales.
El resto de los ingresos proviene de otros gravámenes, como el 4×1.000 ($6,8 billones); Riqueza y Cree ($ 8,7 billones); Gasolina ($ 3,2 billones) e impuesto al Consumo y otros ($ 6,4 billones), todos estos son valores aproximados.
Aparte de los ingresos tributarios, la billetera del Estado también dispone de otras fuentes, como gestión y endeudamiento ($ 65,8 billones) y prestación de servicios y parafiscales ($ 35,7 billones).
Hay tres grandes asignaciones entre los que se reparte toda la plata disponible: funcionamiento, inversión y deuda. Así, del total de los recursos que forman el Presupuesto General se van en funcionamiento, rubro en el cual entran gastos como el pago de la nómina pública, pago de pensiones, compra de dotaciones y transferencias a las regiones, entre otros.
Entre tanto, el gasto en inversión es aproximadamente la tercera parte del total de impuestos que pagan los colombianos ($ 49,4 billones), mientras que para amortizar la deuda se destina la cifra más pequeña entre las tres variables, 47,3 billones.
Cabe destacar que el Presupuesto tiene varios cruces en sus cuentas. Por ejemplo, de la plata destinada a la inversión también se pagan a veces cargos públicos para proyectos especiales. Cada sector de la economía es dotado con un monto, dependiendo de los proyectos que requiera financiar y de las necesidades financieras para su funcionamiento.
El Presupuesto General de la Nación para el 2021 fue de $314 billones de pesos y recientemente su magnitud ha oscilado alrededor del 27% del PIB nacional. Como pueden ver, la riqueza de Colombia proviene del bolsillo de los ciudadanos, las empresas que generan empleo y que todos ellos pagan impuestos. Gracias al esfuerzo que deben realizar por mantener sus empleos y empresas es que el país se mueve económicamente y las deudas que el Estado adquiere con otras naciones tenemos que pagarlas con el esfuerzo de cada ciudadano.
Si bien resulta ser de la mayor importancia el análisis y la toma de decisiones frente a cómo se replantearán los ingresos del Estado para avanzar en la contención de los problemas generados por la pandemia, en realidad esto va mucho más allá. La estabilización del país sólo va a ser posible si se logra hacer cambios drásticos, desde sus estructuras de poder, dando siempre prelación al Estado de derecho, la defensa de los derechos humanos y una interacción amplia, plural, incluyente y pensada a partir de las diversas posiciones expuestas por la ciudadanía.